En respuesta a la adopción, por parte del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, de una resolución que pide pausas humanitarias urgentes y extensas y expone la necesidad de abordar la situación de los niños y las niñas en la Franja de Gaza ocupada, Agnès Callamard, secretaria general de Amnistía Internacional, ha declarado:
“Después de cuatro resoluciones fallidas en los últimos 30 días, el Consejo de Seguridad de la ONU finalmente ha ejercido la función y el liderazgo que según su mandato debe desempeñar: el mantenimiento de la paz y la seguridad, y la protección del Estado de derecho internacional”.
“Aunque la resolución no es prescriptiva en lo que se refiere a la duración de las pausas humanitarias, es un paso muy necesario en medio de un sufrimiento masivo y unas reiteradas violaciones del derecho internacional humanitario.”
“Aunque Estados Unidos se abstuvo en lugar de votar a favor de la resolución, esta es la primera señal de que ese país está dispuesto a apartarse de su postura de apoyo sin reservas a Israel en la ONU. Pedimos al presidente Biden que utilice sobre Israel toda la influencia de su gobierno para que esta resolución se implemente lo antes posible. También instamos a todos los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU a tomar todas las medidas necesarias para garantizar que las dos partes del conflicto cumplen la resolución. Los niños y las niñas de Gaza no pueden esperar.”
“Amnistía Internacional lleva pidiendo un alto el fuego desde el 26 de octubre, y seguirá haciéndolo. Un alto el fuego negociado y completo pondría fin a los ataques ilegítimos de todas las partes, detendría la cifra, en rápido aumento, de muertes en Gaza y permitiría que los organismos de ayuda introdujeran una ayuda vital, agua y suministros médicos en Gaza en respuesta a los sobrecogedores niveles de sufrimiento humano. Un alto el fuego brindaría además la oportunidad de garantizar la liberación de los rehenes retenidos por Hamás y otros grupos armados desde el 7 de octubre.”