Señor embajador:
Amnistía Internacional considera motivo de gran preocupación la inacción del Consejo de Seguridad para poner fin a las flagrantes violaciones del derecho internacional humanitario cometidas por ambas partes en el conflicto de Líbano e Israel, por las que numerosos civiles han pagado un alto precio a ambos lados de la frontera. El Consejo de Seguridad debe tomar de inmediato medidas para proteger a la población civil de ambos países.
El devastador ataque del 30 de julio de 2006 sobre Qana, en el sur de Líbano, en el que la gran mayoría de las victimas fueron niños, es sintomático del modo en que se está combatiendo en este conflicto hasta la fecha.
Israel no ha tomado las precauciones necesarias para evitar los daños a la población civil. Ha lanzado ataques desproporcionados, en los que han muerto y resultado heridos numerosos civiles. Asimismo ha atacado directamente bienes civiles, como carreteras, puentes y centrales eléctricas. En el caso del ataque sobre Qana, las autoridades israelíes han afirmado que Hezbolá utilizaba a civiles como “escudos humanos”, táctica claramente prohibida por el derecho internacional humanitario. Sin embargo, no han aportado ningún dato que lo demuestre. Además, aunque Hezbolá hubiera cometido tal violación del derecho internacional humanitario, Israel no estaba exento por ello de su obligación legal de proteger a los civiles observando estrictamente el principio de proporcionalidad. Por otro lado, el lanzamiento de cohetes de Hezbolá contra localidades israelíes viola la prohibición de los ataques directos contra la población civil.
Dado que los indicios de crímenes de guerra aumentan a diario, Amnistía Internacional hace hincapié en que, como ha resaltado la alta comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, el derecho internacional demanda rendición de cuentas y responsabilidad penal individual, especialmente de quienes ocupan posiciones de mando y control. Amnistía Internacional ve con inquietud que entre los miembros del Consejo de Seguridad circule un proyecto de resolución en el que no se hace ninguna mención de la necesidad de que las partes en el conflicto cumplan las obligaciones que han contraído en virtud del derecho internacional y de que se establezca rendición de cuentas. Es preciso tratar estas cuestiones en la resolución que el Consejo de Seguridad se dispone a adoptar. Asimismo, el Consejo debe pedir a las partes en el conflicto que tomen de inmediato todas las medidas necesarias para proteger de manera efectiva a los civiles y los bienes civiles, observando plenamente los principios de inmunidad de la población civil, distinción y proporcionalidad.
Amnistía Internacional toma nota de que Israel ha anunciado que realizará investigaciones sobre la muerte de civiles a manos de sus fuerzas en Qana. No obstante, nos parece muy decepcionante que no se haya anunciado ninguna investigación sobre otros casos de muerte de civiles. La organización pide que se lleve a cabo una investigación exhaustiva, independiente e imparcial para determinar los hechos en todos los casos de presunta violación grave del derecho internacional humanitario cometida por Israel o Hezbolá en este conflicto. Tal investigación podría correr a cargo de la Comisión Internacional Humanitaria de Encuesta, establecida en virtud del artículo 90 del Protocolo I de los Convenios de Ginebra de 1949. La Asamblea General, al adoptar la Resolución A/RES/55/148, subrayó “la posibilidad de recurrir, en relación con un conflicto armado, a la Comisión Internacional de Encuesta, de conformidad con el artículo 90 del Protocolo I” y recordó que “la Comisión Internacional de Encuesta puede facilitar, en caso necesario y mediante sus buenos oficios, el restablecimiento de una actitud de respeto a los Convenios de Ginebra y al Protocolo”.
Amnistía Internacional acoge con satisfacción las disposiciones de un proyecto de resolución que está circulando actualmente entre los miembros del Consejo de Seguridad, en el que se pide la cesación inmediata de las hostilidades y la creación de las condiciones necesarias para un alto el fuego permanente y una solución duradera a la actual crisis. Nuestra organización insta a que se establezca un alto el fuego inmediato, completo y efectivo para proteger a la población civil de los ataques de ambos bandos. Amnistía Internacional pide al Consejo de Seguridad que incluya disposiciones categóricas a tal efecto en la resolución que adopte. Asimismo, nuestra organización insta al Consejo de Seguridad a que adopte sin demora una resolución en la que:
- se pida a las partes en el conflicto que cumplan de inmediato las obligaciones que han contraído en virtud del derecho internacional humanitario y respeten los principios de distinción y proporcionalidad;
- se pida a Israel y a Líbano que acepten de inmediato la competencia de la Comisión Internacional Humanitaria de Encuesta, establecida en virtud del artículo 90 del Protocolo I de los Convenios de Ginebra, para realizar investigaciones exhaustivas, independientes e imparciales sobre presuntas violaciones graves del derecho internacional humanitario, como las de Qana, e inviten a la Comisión a visitar sus territorios;
- se pida a todos los Estados que ejerzan su jurisdicción sobre los presuntos autores de crímenes de guerra y otros delitos tipificados en el derecho internacional cometidos en el presente conflicto para garantizar que se rinden cuentas individualmente;
- se pida a las partes en el conflicto que permitan el acceso humanitario inmediato y sin restricciones a los civiles y garanticen su paso seguro y sin obstáculo desde las zonas de operaciones militares y se inste a la comunidad internacional a prestar su apoyo a las Naciones Unidas para crear las condiciones necesarias para la protección y asistencia de todas las personas desplazadas por el actual conflicto.
Amnistía Internacional le agradece su atención a estos asuntos.
Atentamente,
Irene Khan Secretaria General