Ante la adopción por la Asamblea General de la ONU de una resolución que establece el 11 de julio como Día Internacional de Reflexión y Recordatorio del Genocidio de Srebrenica de 1995, Jelena Sesar, investigadora para Europa de Amnistía Internacional, ha declarado:
“Esta resolución, que debería haberse adoptado hace mucho tiempo, supone un importante reconocimiento público de las víctimas y sus familias y es un merecido homenaje a las personas supervivientes que han luchado durante casi 30 años para mantener vivo el recuerdo de los terribles acontecimientos sucedidos en Srebrenica".
“Las autoridades de algunas zonas de Bosnia y Herzegovina y la región siguen negando los crímenes y practican una peligrosa glorificación de quienes fueron declarados culpables de genocidio y crímenes contra la humanidad”
“Lamentablemente, las autoridades de algunas zonas de Bosnia y Herzegovina y la región siguen negando los crímenes y practican una peligrosa glorificación de quienes fueron declarados culpables de genocidio y crímenes contra la humanidad. Y lo hacen a pesar de que los tribunales internacionales han demostrado más allá de toda duda que el homicidio de más de 8.000 hombres y niños en 1995 constituyó un acto de genocidio".
“Más que un mero acto conmemorativo, la resolución subraya el compromiso colectivo con la justicia, la verdad y la reparación, así como la determinación de aprender de las atrocidades del pasado para evitar crímenes similares en el futuro. Debe animar a la comunidad global a afrontar y rebatir la negación del genocidio y a invertir en educación y otros programas públicos de información para salvaguardar los hechos históricos y evitar el genocidio antes de que se produzca.”
Información complementaria
La resolución, propuesta conjuntamente por Alemania y Ruanda, y copatrocinada por Estados Unidos, Francia y Bosnia y Herzegovina, entre otros países, recibió el apoyo de 84 de los 171 Estados miembros de la ONU.
El Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia (TPY) y la Corte Internacional de Justicia (CIJ) dictaminaron que los crímenes cometidos en Srebrenica habían constituido actos de genocidio.
El 10 y el 11 de julio de 1995, más de 8.000 hombres y niños musulmanes bosnios fueron asesinados cuando el Ejército de los Serbios de Bosnia atacó Srebrenica —designada por la ONU como “zona segura”— a pesar de la presencia de fuerzas de mantenimiento de la paz de la ONU.
Aunque se han exhumado, identificado y enterrado los cadáveres de más de 7.000 víctimas del genocidio de Srebrenica, más de 1.000 personas permanecen en paradero desconocido o sus restos esperan a ser recuperados e identificados.