El pasado mes de noviembre lanzamos una ciberacción urgente porque el gobierno de Kenia quería cerrar el campo de refugiados de Dadaab. El más grande del mundo, con 260.000 somalíes viviendo en él tras haber huido de la guerra. Pedimos tu firma para que se respetaran y protegieran los derechos estas personas... ¡y lo logramos!
En una resolución judicial histórica se ha bloqueado la decisión unilateral del gobierno de Kenia de cerrar el campo.En su resolución, el juez JM Mativo manifestó que las órdenes del gobierno eran discriminatorias, excesivas, arbitrarias y desproporcionadas. El cierre de Dadaab habría dejado en la práctica a más de 260.000 personas refugiadas somalíes sin ningún lugar adonde ir. La mayoría de las personas que hablaron con Amnistía Internacional para un informe publicado en noviembre de 2016 acusaron a autoridades gubernamentales de Kenia de coaccionarlas para que regresaran a Somalia contra su voluntad.“Lo que quiero es quedarme", nos contó Aisha, madre soltera de tres niños pequeños. "No hay ningún otro lugar adonde ir", remarca, y menos a Somalia, donde "no hay paz". Ella misma lo comprobó durante su breve regreso en agosto pasado: "Al Shabaab entró en el barrio. El hombre con el que vivía fue asesinado y a mí me dieron una paliza". También se llevaron el poco dinero que tenía y destruyeron su tienda en el mercado. Se repetía la pesadilla, porque Aisha había llegado a Dadaab a los 12 años con sus dos hermanas después de que mataran a sus padres en Somalia.“es un día histórico para más de un cuarto de millón de personas refugiadas que corrían peligro de ser devueltas a Somalia, donde se habrían enfrentado a un grave riesgo de sufrir abusos contra los derechos humanos. Esta resolución reafirma la obligación constitucional e internacional de Kenia de proteger a las personas que buscan seguridad frente al daño y la persecución.”
Muthoni Wanyeki, directora regional de Amnistía Internacional para África Oriental, el Cuerno de África y los Grandes Lagos
¡Gracias por ayudarnos a defender los derechos de las personas refugiadas en Kenia! ¡Gracias por cambiar el mundo!