Tras la votación efectuada hoy en el Parlamento de una nueva ley que prohíbe el reconocimiento legal de las personas transgénero e intersexuales en Hungría, Krisztina Tamás-Sáróy, investigadora de Amnistía Internacional, ha declarado:
“Esta decisión hace retroceder a Hungría a la Edad Media y pisotea los derechos de las personas transgénero e intersexuales. No sólo las expondrá a más discriminación, sino que, además, ampliará el entorno que ya es intolerante y hostil, al que se enfrenta la comunidad LGBTI.
“Es fundamental que el comisario para los Derechos Fundamentales de Hungría actúe con urgencia y pida que el Tribunal Constitucional revise y anule de forma expeditiva las terribles disposiciones de esta ley.
“La identidad de género de todas las personas debe estar reconocida legalmente y todas las personas deben poder cambiar su nombre legal y las menciones relativas al sexo en todos los documentos oficiales”.
Información general
Esta ley representa el intento más reciente de recortar los derechos de las personas transgénero e intersexuales. El proyecto de ley recibió críticas generalizadas tanto en Hungría como en el ámbito internacional.
La ley exige inscribir el sexo de las personas al nacer en el registro nacional de nacimientos, matrimonios y defunciones, y no podría modificarse posteriormente. Como consecuencia, en el documento de identidad de cada persona figuraría la misma información, sin posibilidad de cambiarla, lo que limitaría la posibilidad de que las personas transgénero e intersexuales inscribieran su nombre y obtuvieran la documentación correspondiente con arreglo a su identidad de género.