Petición antes del cierre
Son valientes. Lo arriesgan todo para defender en Irán derechos básicos como el de libre expresión, justicia, contra la discriminación y la pena de muerte.... Por ello están pagando un precio muy alto: hostigamiento, torturas, largas penas de prisión e incluso condenas a muerte.
(Actualizado el 26 de febrero de 2018) Ahora dos de estas personas, Atena Daemi y Golrokh Ebrahimi Iraee, han sido trasladadas a una peligrosa prisión. En realidad se trata de una granja avícola en desuso que alberga a varios centenares de mujeres condenadas por delitos violentos y que permanecen recluidas en condiciones insalubres y de hacinamiento. Este centro es conocido por sus altos niveles de agresión contra las reclusas por parte tanto de otras reclusas como de personal penitenciario, así como un consumo de drogas descontrolado y una proliferación de enfermedades infecciosas. A menudo las autoridades amenazan a las activistas presas que siguen hablando abiertamente con trasladarlas a esta prisión y en algunos casos, como éste, cumplen su amenaza. Atena y Golrokh decidieron inciar una huelga de hambre para protestar por su traslado ilegal a esta prisión. También lo está el esposo de Golrokh, Arash Sadeghi, que ya se encuentra muy debilitado por anteriores huelgas de hambre. El 15 de febrero, estando su vida en peligro por la huelga, y después de que 12 destacadas defensoras de los derechos humanos dentro y fuera de Irán pidieran a Golrokh y Atena que detuvieran su protesta para que pudieran continuar viviendo y realizando su importante labor en pro de los derechos humanos, Atena Daemi anunció que detenía su huelga de hambre, y Golrokh Ebrahimi Iraee continuaría con su huelga pero comenzaría a tomar líquidos.Esta situación demuestra el espantoso entorno de quienes se atreven a defender los derechos humanos en Irán, donde las autoridades criminalizan cualquier forma de disidencia o activismo pacífico. Arash Sadeghi, Golrokh Ebrahimi Iraee y Atena Daemi son presos y presas de conciencia que han dedicado valientemente su vida a construir una sociedad más humana y más justa. Es terrible que se les castigue tan cruelmente por su firme compromiso con los derechos humanos. ¡Deben ser puestos en libertad de forma inmediata e incondicional!“Terminé mi huelga de hambre hoy [15 de febrero de 2018] para seguir con vida y seguir siendo una espina en los ojos de mis enemigos.”Atena Daemi