Comprométete contra la pena de muerte
China: Crímenes de lesa humanidad contra uigures y otras etnias musulmanas ¡Están en peligro! ACTÚA
Esta acción ha finalizado. Hemos sido 4.995 firmantes
La petición de libertad para cientos de miles de personas uigures y otras etnias musulmanas ha tenido un gran apoyo. ¡A nivel mundial hemos superado las 237.000 firmas!
Hoy en día, la situación en Xinjiang continúa siendo desoladora y las personas uigures y de otras etnias predominantemente musulmanas siguen siendo amedrentadas y recluidas forzosamente en centros de internamiento de manera sistemática.
No obstante, nuestras voces han ido propagándose y la situación en Xinjiang es cada vez más conocida a nivel internacional. El pasado mes de junio un grupo interregional de 45 países, incluyendo a España, ha presentado una comunicación ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU resaltando la grave preocupación sobre las evidencias de crímenes de lesa humanidad en Xinjiang. Enviando un mensaje crucial a las autoridades chinas de que no se encuentran por encima del escrutinio internacional.
Se espera organizar diferentes eventos coordinados a nivel internacional frente a Embajadas de China y sitios simbólicos para la entrega formal de la petición y las firmas de apoyo que han sido recogidas en todo el mundo. Desde Amnistía Internacional seguiremos trabajando arduamente por los derechos de miles de personas uigures y de otras etnias predominantemente musulmanas en Xinjiang.
¡Gracias a las más de 4.995 personas que han participado en esta acción!>
Petición antes del cierre
Se calcula que un millón de personas – tal vez más - de la región de Xinjiang, han pasado por campos de internamiento del gobierno chino desde 2017. Allí son sometidas a una campaña de adoctrinamiento, además de a tortura y otros malos tratos físicos y psicológicos.
¿Por qué están pasando por este horror? Por tener su propio idioma, costumbres y ritos al pertenecer a etnias musulmanas de Xinjiang. El gobierno chino quiere integrarlas a la fuerza en una nación china homogénea con un idioma y una cultura unificados y una inquebrantable lealtad al Partido Comunista Chino.
“Creo que el objetivo [de las clases] era destruir nuestra religión y asimilarnos [...] Decían que no podíamos utilizar la expresión as-salamualaykum, y que si nos preguntaban cuál era nuestra etnia, debíamos responder ‘china’ [...] Nos decían que no debíamos asistir a las oraciones del viernes [...] y que quien te lo daba todo no era Alá, sino Xi Jinping. Que no debíamos dar gracias a Alá, sino a Xi Jinping por todo.”
Querer viajar, estudiar en el extranjero, comunicarse con familiares, recitar el Corán, llevar ropa religiosa, tener una alfombrilla para rezar o no beber alcohol, puede ser un motivo para acabar en estos campos, o directamente en la cárcel
El gobierno dice que el internamiento en los campos es voluntario, pero tanto las personas que han podido salir de esos campos, como ex funcionarios/as del gobierno con los que también hemos hablado, lo desmienten.
Lo que está haciendo el gobierno chino consideramos que son crímenes de lesa humanidad. ¡FIRMA! Es urgente que todos los hombres, mujeres, niños y niñas uigures, kazajas y de otros grupos étnicos musulmanes salgan de estos campos y estén libres.
Te recomendamos firmar...