Raif Badawi es bloguero y activista saudí. Después de pasar 10 años en prisión ahora es libre, pero todavía no ha podido abrazar a su esposa e hijos, porque tiene prohibido salir de Arabia Saudí durante 10 años más.
Durante los últimos tres años, Arabia Saudí se ha esforzado en intentar mejorar su imagen internacional. Grandes eventos deportivos, como la Supercopa de España o el Gran Premio de Fórmula 1 nos muestran que es un país abierto y reformista. Pero esa transformación superficial esconde otra realidad: la constante e implacable represión a decenas de personas simplemente por expresar sus opiniones.
Raif Badawi no es el único. Loujain al Hathloul, Samar Badawi o Nassima al Sada son solo algunos de los nombres de una larga lista de activistas a quienes los tribunales han prohibido salir del país después de pasar años en la cárcel.
En Arabia Saudí, hace tiempo que intentan amedrentar a defensores y defensoras de los derechos humanos y activistas pacíficos con detenciones y sentencias condenatorias. Pero incluso después de cumplir condena, estas personas siguen sin ser libres. Tienen que vivir sometidas a largas prohibiciones de viajar entre 5 hasta 20 años. Estas prohibiciones se imponen en ocasiones sin orden judicial alguna, y las personas afectadas se dan cuenta de ello cuando intentan viajar y las autoridades saudíes se lo impiden en los aeropuertos o los pasos fronterizos.
Firma la petición y di al rey Salman que levante ya las prohibiciones de viajar impuestas a activistas, defensores y defensoras de los derechos humanos y sus familiares para que puedan, de verdad, ser libres.
Ayúdanos a llegar a 10.017
Firma y enviaremos esta petición en tu nombre al rey Salman.
Enviaremos esta petición junto con tu nombre, apellidos y país.
Estimado Sr.
Me pongo en contacto con Usted en relación a la prohibición de viajar impuesta a decenas de activistas y defensores y defensoras de los derechos humanos que impiden a estas personas salir de Arabia Saudí. Si bien en los últimos años la sociedad saudí ha sido testigo de una transformación vertiginosa, la realidad es que al menos 30 defensores y defensoras de los derechos humanos de Arabia Saudí que fueron condenados a prisión tras juicios manifiestamente injustos se encuentran sometidos a la prohibición de viajar inmediatamente después de cumplir la pena de cárcel. Además, casi 40 familiares de activistas que también se encuentran sometidos a la prohibición de viajar —sin orden oficial ni ninguna otra forma de notificación—, algo que en la práctica supone la separación forzosa de familias.
Las autoridades de su país no pueden seguir hablando de reformas y aperturismo cuando le cierran las puertas a su propia ciudadanía silenciando implacablemente a las voces disidentes. Por ello, le pido que levante la prohibición arbitraria de viajar en todos los casos, dejen de utilizar esta práctica revanchista y empiecen a respetar los derechos de libertad de expresión y circulación.
Atentamente,
Si quieres recibir otras acciones como esta e información adicional de Amnistía Internacional para cambiar el mundo, haz click en el botón.