Marinel Sumook Ubaldo tenía 16 años cuando sobrevivió al tifón Yolanda, uno de los más mortíferos de la historia. Solamente en Filipinas murieron 6.000 personas, y millones perdieron su casa. Marinel tuvo claro que tenía que encontrar una manera de combatir el cambio climático y sus devastadores efectos en todo el mundo empezando por su país.
Esta activista, que ahora tiene 22 años, lucha para que el gobierno de Filipinas garantice a las personas de su comunidad condiciones de vida dignas porque seis años después de la devastación del tifón Yolanda siguen viviendo en condiciones insalubres y necesitan comida, agua, casa, electricidad y aseos.