Para poner fin a la impunidad hace falta una dirección responsable y un planteamiento global

(Beirut) Con motivo de las últimas manifestaciones celebradas en las calles de Beirut, en las que han participado miles de personas, Irene Khan, secretaria general de Amnistía Internacional, ha pedido garantías a los dirigentes políticos de que las manifestaciones no van a degenerar en situaciones de violencia política que den lugar a abusos contra los derechos humanos. “Desde el punto de vista de los derechos humanos, se trata de un despliegue extraordinario de personas que están ejerciendo su libertad de expresión y de reunión por medios en gran medida pacíficos” ha asegurado Irene Khan. Sin embargo, ante la noticia de al menos una muerte violenta ocurrida ayer, la señora Khan advierte: “Líbano tiene un desafortunado historial de conflicto político en torno a líneas sectarias que ha dado lugar a la comisión de violaciones generalizadas de derechos humanos en el pasado, la mayoría de cuyos casos no se han resuelto aún. Todos los agentes políticos deben actuar de manera responsable para evitar que se repitan los errores del pasado”. En reuniones celebradas con el presidente Lahoud, el primer ministro Siniora y el portavoz Berri, la señora Khan hizo el siguiente llamamiento: “Todos los dirigentes políticos deben utilizar su influencia para garantizar que las manifestaciones no degeneran en situaciones de violencia política que den lugar a la comisión de abusos contra los derechos humanos”. Irene Khan se encuentra en Beirut como parte de una visita a Oriente Medio. Ayer visitó el sur del Líbano para comprobar de primera mano los efectos de la última guerra en la población civil. “El número de víctimas mortales y la destrucción de infraestructura son enormes. Los acontecimientos políticos actuales en Beirut no deben desviar la atención de los esfuerzos de reconstrucción; la gente sigue necesitando ayuda urgente y continua para hacer frente a las secuelas de la guerra” ha manifestado Irene Khan. “Las manifestaciones políticas no pueden restar importancia a la necesidad de abordar la impunidad. La ausencia de mecanismos eficaces para hacerle frente ha generado un alto índice de desconfianza en Líbano, parte de la cual se está expresando ahora en las manifestaciones.” Amnistía Internacional manifestó que el sistema libanés no había garantizado justicia por los casos de homicidio político y otros abusos cometidos en el pasado. “Hace falta una estrategia global con medidas concretas que procuren justicia a todas las personas” ha  manifestado la señora Khan. En referencia al tribunal propuesto para juzgar a los culpables de participar en el magnicidio del ex primer ministro Hariri, Amnistía Internacional advirtió de que un tribunal con un componente internacional tendría más valor si formara parte de esa estrategia integral. “Las divisiones políticas actuales demuestran que existe desconfianza y recelo, y estos sentimientos no harán sino enquistarse si se adopta un enfoque selectivo de la justicia” ha afirmado la secretaria general de Amnistía Internacional. “Una estrategia global exige la reforma del sistema de justicia libanés y el compromiso con los tratados internacionales de derechos humanos.” Amnistía Internacional pide que se adopte un enfoque global respecto a la rendición de cuentas en Líbano. Este planteamiento debería incluir: el establecimiento de una comisión de investigación que examine los abusos contra los derechos humanos cometidos por ambas partes durante el último conflicto bélico; la reforma del sistema judicial nacional, que incluya la abolición de los tribunales militares para delitos civiles, del Consejo de Justicia y de la utilización de pruebas obtenidas mediante tortura; la revocación de las leyes de amnistía para que se puedan investigar y procesar abusos cometidos en el pasado; y la ratificación del Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional.