En respuesta a la noticia de que Kazajistán ha firmado el Segundo Protocolo Facultativo del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, por el que se compromete a abolir la pena de muerte, Marie Struthers, directora de Amnistía Internacional para Europa Oriental y Asia Central, ha declarado:
“Esta noticia nos parece muy positiva, pues Kazajistán está más cerca de sumarse a la creciente familia de naciones que dejan atrás esta vergonzosa pena. El país debe dar ahora un último paso: abolir la pena de muerte en su legislación para todos los delitos y ratificar el Segundo Protocolo Facultativo sin reservas.”
Rusia, Tayikistán y Bielorrusia son ya los tres únicos países de Europa y Asia Central que no han firmado o ratificado aún el Segundo Protocolo Facultativo. Bielorrusia es el único país de la región que lleva todavía a cabo ejecuciones.
“La abolición de la pena capital sigue siendo prioridad mundial para Amnistía Internacional.”
Información complementaria
El presidente kazajo, Kassym-Jomart Tokayev, ha anunciado, en su discurso ante la Asamblea General de las Naciones Unidas durante su 74 periodo de sesiones, que su país se sumará a los que han firmado el protocolo sobre la abolición de la pena de muerte.
Kazajistán, que prevé la pena capital en el caso de los delitos de terrorismo, mantiene una moratoria indefinida sobre su ejecución desde 2003. Los tribunales dejaron de imponerla en 2004, pero se hizo una excepción en 2016, cuando un hombre declarado culpable de un tiroteo masivo ocurrido en Almaty fue condenado a muerte. Es la única persona sobre la que pesa la pena de muerte en Kazajistán.