Ante el arresto violento y la continuidad de la detención de la doctora rusa Anastasia Vasilyeva, líder de un sindicato de profesionales médicos que denunció debilidades en la preparación del sistema de salud para luchar contra el coronavirus, COVID-19, Natalia Zviagina, directora de Amnistía Internacional Rusia, ha afirmado:
Es asombroso que las autoridades rusas parezcan temer más a las críticas que a la mortífera pandemia de COVID-19. Justifican la detención y reclusión de Anastasia Vasilyeva con el pretexto de que ella y sus colegas médicos violaron las restricciones en materia de viajes, cuando lo cierto es que intentaban entregar equipos de protección indispensables al personal médico en un hospital local. Mantenerla entre rejas revela su verdadera motivación: están dispuestas a castigar a las y los profesionales de la salud que se atreven a contradecir el discurso oficial ruso y denunciar las deficiencias en el sistema de salud pública.
“La detención de esta doctora es más absurda si cabe por tratarse de una profesional de la medicina comprometida con la defensa del derecho a la salud en primera línea de la lucha contra el coronavirus. En cambio, está entre rejas y silenciada por haberse atrevido a criticar a las autoridades.
“El acceso a la información es un aspecto clave del derecho a la salud. Todas las personas tienen derecho a ser informadas de las medidas de respuesta adoptadas. No garantizar este derecho debilita la respuesta de los servicios de salud pública y pone en riesgo la salud de todo el mundo.
“Las autoridades rusas deben poner en libertad de inmediato y sin condiciones a Anastasia Vasilyeva, a quien Amnistía Internacional considera presa de conciencia, e investigar el deplorable comportamiento de la policía al practicar el arresto. Según informes, la asfixiaron y la golpearon en el abdomen, haciendo que se desmayara.”
Información complementaria
Anastasia Vasilyeva, colegas del sindicato Alianza de Doctores y periodistas que los acompañaban fueron detenidos a la entrada de Okulovka, población de la región de Novgorod (oeste de Rusia) el 2 de abril. El personal voluntario llevaba mascarillas y otros equipos de protección para el personal médico del hospital local.
Se les acusó de “incumplimiento de las normas de conducta para prevenir y liquidar la situación de emergencia” y después quedaron en libertad. Sin embargo, a Anastasia Vasilyeva no se le permitió salir de la comisaría de policía y la llevaron arrastraron forma violenta de nuevo al interior. Según informes, la asfixiaron y la golpearon en el abdomen, como consecuencia de lo cual perdió el conocimiento. Se le denegó el acceso a un abogado durante unas seis horas. Anastasia Vasilyeva pasó la noche bajo custodia policial y va a ser sometida a juicio por cargos de “desobedecer a un agente de policía”.
El 31 de marzo, Anastasia Vasilyeva compareció ante el Comité de Investigación para ser interrogada en relación con un material publicado en YouTube en el que pedía al personal médico que no trabaje sin equipo de protección.