Decenas de miles de partidarios de Amnistía Internacional de todo el mundo pedirán a las autoridades chinas hoy, 3 de junio de 2008, que dejen en libertad a las decenas de personas que se encuentran presas desde las protestas de Tiananmen, ocurridas hace 19 años.
“En la represión de Tiananmen de junio de 1989 se mató a centenares de personas, y decenas de aquellos manifestantes se consumen todavía en las cárceles chinas tras juicios flagrantemente injustos, mientras que muchos otros activistas han sido encarcelados posteriormente por dar a conocer o cuestionar la actuación del gobierno en 1989. No hay absolutamente ninguna excusa para que las autoridades chinas mantengan todavía encarceladas a estas personas”. Ha manifestado Sam Zarifi, director del Programa para Asia y Oceanía de Amnistía Internacional.
En todo el mundo, de Londres a Tel Aviv o Ciudad de México, millares de partidarios de Amnistía Internacional pondrán flores rojas y blancas en distintos lugares en solidaridad con los familiares de las personas muertas y detenidas durante la represión de las protestas en favor de la democracia del 3 y 4 de junio de 1989. Guardarán también un minuto de silencio por las victimas del terremoto ocurrido el 12 de mayo en la provincia china de Sichuan, y expresarán sus condolencias y su solidaridad a los supervivientes.
“Las autoridades chinas han demostrado que pueden responder a las crisis naturales con gran eficiencia -ha explicado Sam Zarifi-. Les instamos a que hagan lo mismo cuando lo que se ve afectado son los derechos humanos, entre ellos el derecho a expresar pacíficamente opiniones.”
“China ha prometido mejoras en la situación de los derechos humanos durante el periodo previo a los Juegos Olímpicos. Dejar en libertad a los activistas de Tiananmen que se encuentran presos, hacer justicia a los familiares de los que murieron y permitir que se conmemore y llore en público a las víctimas será un gran avance en el establecimiento de un legado positivo de los Juegos en materia de derechos humanos.”
“El gobierno chino debe brindar apoyo y protección a las familias de las personas muertas en la represión de Tiananmen, en vez de acosarlas, como lleva años haciendo. Es hora de que China asuma esta tragedia e inicie el proceso de rendición de cuentas y curación de las heridas.”
Información complementaria Según la Fundación Dui Hua, que tiene su sede en Estados Unidos, todavía hay entre 60 y 100 personas encarceladas por delitos cometidos durante las protestas de Tiananmen. Se ignora su número exacto, pues las autoridades no lo han hecho público.
Las autoridades chinas excarcelaron a varias personas en 2006, pero todavía las someten a estricta vigilancia policial y les impiden toda actividad que quepa considerar delicada desde el punto de vista político, como hablar con periodistas de sus experiencias.
Las Madres de Tiananmen, grupo de activistas de derechos humanos que perdieron a sus hijos, hijas y otros parientes próximos en la represión, siguen pidiendo a las autoridades chinas que permitan a las familias de las víctimas ejercer su derecho de duelo en público, que pongan fin a la persecución de las víctimas y sus familias, que dejen en libertad a todas las personas aún presas por haber participado en protestas pacíficas y que realicen una investigación completa y pública sobre los sucesos de junio de 1989. Las autoridades del gobierno las han sometido a hostigamiento, discriminación y detención arbitraria.
Casos Algunas de las personas que continúan encarceladas por su participación en las protestas de Tiananmen de 1989 son:
Miao Deshun, detenido en junio de 1989 y declarado culpable de incendio provocado. La condena suspendida de muerte que le impusieron en un principio se conmutó por cadena perpetua en 1991, y luego se redujo a 20 años de cárcel en 1998. Actualmente se encuentra recluido en la prisión de Yanqing, a las afueras de Pekín, y deberá ser puesto en libertad el 15 de septiembre de 2018.
Liu Zhihua, que formaba parte de un grupo de trabajadores que organizaron una huelga en la fábrica de maquinaria eléctrica de Xiangtan, provincia de Hubei. La cadena perpetua a que fue condenado en un principio por pronunciar “discursos contra el gobierno” e incitar a una multitud a participar en “palizas, destrozos y saqueos” se redujo a 15 años en septiembre de 1993, pero volvió a ampliarse cinco años más en 1997 por la participación de Liu Zhihua en una pelea. Con la condena reducida otros dos años en 2001 por buena conducta, ahora deberá ser puesto en libertad el 16 de enero de 2011.
Wang Jun, trabajador de la provincia de Shaanxi, de 18 años edad en el momento de las protestas. Le impusieron una condena suspendida de muerte por arrojar piedras, romper farolas e incendiar varios vehículos durante “graves disturbios políticos” ocurridos en la fabrica de Xincheng de la ciudad de Xi’an el 22 de abril de 1989. Actualmente se encuentra recluido en la prisión de Fuping, provincia de Shaanxi. Tras habérsele reducido la condena cuatro veces, deberá ser puesto en libertad el 11 de diciembre de 2009.
Amnistía Internacional pide al gobierno chino que otorgue una amnistía a todas las demás personas encarceladas en relación con las protestas de 1989, habida cuenta del largo tiempo que han pasado en prisión, del carácter sumario e injusto de sus juicios y del hecho de que no se han atendido los reiterados llamamientos para que sean juzgadas de nuevo de acuerdo con las normas internacionales.
Se sigue sometiendo a hostigamiento, detención y prisión a periodistas que informan de la represión de las protestas de 1989 y a activistas que apoyan pacíficamente la conmemoración de aquellos hechos. Amnistía Internacional los considera presos de conciencia, que deben ser puestos en libertad de forma inmediata e incondicional. Algunos de ellos son:
Kong Youping, ex sindicalista condenado a 15 años de prisión en septiembre de 2004 por haber publicado artículos y poemas en Internet en los que se pedía una reevaluación oficial del movimiento de 1989 en favor de la democracia. Cumple condena en la prisión de Lingyuan, provincia de Liaoning.
Yang Tongyan (seudónimo: Yang Tianshui), escritor independiente, que cumple una pena de 12 años de cárcel en la prisión municipal de Nanking, provincia de Jiangsu, por el cargo de “subversión”, presentado sobre la base de acusaciones como escribir en favor del cambio político y democrático en China. Anteriormente había cumplido 10 años de prisión por criticar la represión del movimiento de 1989 en favor de la democracia y tratar, presuntamente, de formar un partido político de oposición. Según informes, en 2007 lo obligaron a confeccionar balones de fútbol y baloncesto en un entorno aparentemente tóxico durante periodos de entre 8 y 10 horas al día, aunque al final del año lo trasladaron a un trabajo menos arduo en la biblioteca de la prisión.
Shi Tao, que continúa cumpliendo una condena de 10 años por haber enviado un mensaje de correo electrónico en el que resumía un comunicado del Departamento Central de Propaganda sobre cómo debían tratar los periodistas el 15º aniversario de la represión del movimiento de 1989 en favor de la democracia. Al final de junio de 2007 lo trasladaron a la prisión de Deshan, en la ciudad de Changde, provincia de Hunan, donde sus condiciones de reclusión parecen haber mejorado y donde su madre puede ahora visitarlo con regularidad. El Tribunal Popular Supremo ha aceptado, según informes, una solicitud de revisión de su caso, pero no ha dicho nada más.