En respuesta a la detención de la consejera de Estado Aung San Suu Kyi y de otras personas, y a las informaciones según las cuales en Myanmar se está desarrollando un golpe militar, la directora regional adjunta de campañas, Ming Yu Hah, ha declarado:
“La detención de Aung San Suu Kyi, de altos cargos y de otras figuras políticas es sumamente alarmante. Las personas detenidas deben quedar en libertad de inmediato, salvo que puedan ser acusadas de algún delito común reconocible con arreglo al derecho internacional.
“El ejército myanmaro debe aclarar el fundamento legal de estas detenciones, y también debe garantizar que se respetan plenamente los derechos de las personas detenidas, entre ellos el derecho a no ser maltratadas, y que pueden acceder a sus familiares y a asistencia letrada de su elección. Además, debe confirmar su paradero y darles acceso a atención médica.
“La situación de Myanmar es inquietante para quienes viven en el país, y hay peligro de que se produzca un grave incremento de la represión y la impunidad del ejército. La detención simultánea de figuras destacadas del activismo político y defensores y defensoras de los derechos humanos es un aterrador mensaje de que las autoridades militares no tolerarán ninguna voz discrepante en medio de los acontecimientos que se desarrollan hoy.
“En anteriores golpes y acciones represivas del ejército en Myanmar, las fuerzas de seguridad han perpetrado actos de violencia y homicidios extrajudiciales a gran escala. Instamos a las fuerzas armadas a que actúen con moderación y respeten las normas y leyes del derecho internacional humanitario y de los derechos humanos, y a que la policía retome lo antes posible las tareas de aplicación de la ley.
“Hay informes de que las telecomunicaciones están bloqueadas, lo cual supone un peligro adicional para la población en momentos tan inestables, especialmente cuando Myanmar libra una lucha contra la pandemia y en varias zonas del país la población civil está en riesgo debido al conflicto interno contra grupos armados. Es fundamental que se reanuden de inmediato todos los servicios de telefonía e Internet.”
Información complementaria
La jefa del Estado de facto de Myanmar, Aung San Suu Kyi, y otras destacadas figuras del partido gobernante, la Liga Nacional para la Democracia, así como dirigentes gubernamentales regionales, fueron detenidos hoy en redadas efectuadas a primera hora de la mañana. También hay informes de la detención de dirigentes estudiantiles y de partidos étnicos, así como de figuras del activismo y de la defensa de los derechos humanos.
Posteriormente esta misma mañana, una cadena de televisión propiedad del ejército anunció que se impondría un estado de excepción de un año bajo la autoridad del comandante en jefe, el general Min Aung Hlaing.
En los últimos días había habido informes del aumento de las tensiones entre dirigentes de la Liga Nacional para la Democracia y representantes del ejército en vísperas de la primera sesión del Parlamento recién elegido, prevista para hoy.
El ejército y su partido afín, el Partido para la Solidaridad y el Desarrollo de la Unión, han denunciado irregularidades y conductas indebidas generalizadas por parte de la Comisión Electoral de la Unión en las elecciones del 8 de noviembre de 2020, en las que la Liga Nacional para la Democracia incrementó su mayoría parlamentaria. El 15 de noviembre de 2020, la Comisión confirmó la victoria de Aung San Suu Kyi y de la Liga Nacional para la Democracia en las elecciones generales,al haber conseguido 396 de los 498 escaños de las dos cámaras del Parlamento.
Además de las detenciones de primera hora de la mañana, ha habido informes de interrupción de servicio telefónico y de Internet en varias zonas del país, incluida su capital, Naipyidó, así como su mayor ciudad, Yangón, y también en los estados de Shan y de Kachin y en las regiones de Mandalay y de Sagaing.