Escribe al Presidente Bush para pedir el cierre de Guantánamo en actuaconamnistia.org

Madrid.- Amnistía Internacional lanza hoy una nueva acción a través de Internet en la que la organización pide al presidente Bush el cierre del centro de detención de Guantánamo -donde cientos de personas de unas 35 nacionalidades siguen recluidas en un limbo jurídico sin precedentes- y acuse formalmente a los detenidos aplicándoles las leyes estadounidenses ante los tribunales. Si no es así, Amnistía Internacional pide la puesta en libertad de todos ellos. Cualquier persona que lo desee puede adherirse a esta petición en la página web www.actuaconamnistia.org Guantánamo no es un caso único, sino la punta de un iceberg de abusos. La organización solicita al presidente norteamericano que desvele el resto de centros de detención repartidos por todo el mundo ya que, según Amnistía Internacional, Estados Unidos ha detenido a unas 70.000 personas fuera de su territorio desde finales de 2001, y cree que son más de 10.000 las que continúan bajo custodia estadounidense en prisiones y campos de Estados Unidos, Cuba, Irak, Afganistán y lugares secretos. Las reclusiones prolongadas tanto en Guantánamo como en otros centros de detención de miles de personas ha facilitado el uso de la tortura y los malos tratos. Animados por el ejemplo estadounidense, gobiernos de todo el mundo también han desobedecido y puesto en tela de juicio la prohibición internacional de torturar. Los Estados han infligido sufrimientos indescriptibles a los presos con métodos tan detestables y brutales que la comunidad internacional los había declarado ilegales hace mucho tiempo. "Esta espiral de violaciones de derechos humanos debe acabar. La tortura y los malos tratos son repugnantes, inmorales, ilegales, y siempre inadmisibles", asegura la organización. Amnistía Internacional también pide a George Bush que respalde una investigación completa e independiente sobre las políticas y prácticas de detención e interrogatorio, incluidos la tortura y los malos tratos. Esta acción se enmarca dentro de la campaña mundial contra la tortura que Amnistía Internacional lanzó el pasado 26 de junio, con motivo del Día Internacional de Apoyo a las Víctimas de Tortura. Campos secretos de detención - Artículo de The Washington Post Aunque Amnistía Internacional no dispone de información que, de modo específico, confirme la existencia de campos de detención por parte de la CIA en países de Europa Oriental, no resulta sorprendente lo que ayer desvelaba el artículo de The Washington Post bajo el título en inglés "CIA Holds Terror Suspects in Secret Prisons". De hecho, Amnistía Internacional ya tiene información sobre campos secretos en Yemen, que hizo pública en un informe de agosto de 2005. En ese informe se citaba el caso de dos hombres encarcelados en una prisión yemení que contaron a Amnistía Internacional que estuvieron recluidos en régimen de aislamiento en un centro secreto de detención estadounidense durante más de año y medio, sin ver la luz del día y casi todo el tiempo con grilletes y esposas, y sin posibilidad de comunicarse con sus familias, con abogados ni con organizaciones humanitarias. No sabían siquiera en qué país estaban. La organización ha tenido conocimiento y ha venido expresando preocupación en relación a detenciones secretas por parte de la CIA en muchos lugares del mundo. Las detenciones secretas equivalen a "desapariciones" y constituyen violaciones del derecho internacional. Amnistía Internacional también expresa su preocupación porque las operaciones de la CIA no estén sujetas a supervisión y permanezcan cubiertas bajo el velo del secreto. Sus operaciones se encuentran enteramente fuera de la ley. El gobierno de los Estados Unidos se opone a una enmienda adoptada por el Senado sobre regulación del tratamiento de todos los detenidos mantenidos bajo custodia de los Estados Unidos fuera de su territorio, lo cual es motivo de adicional preocupación. Estados Unidos está obligado a aplicar las mismas normas internacionales de derechos humanos respecto de toda persona bajo detención o custodia norteamericana, donde quiera que ocurra en el mundo.