El asesinato de tres mujeres trans en Argentina en el último mes debe llevar a las autoridades a tomar acciones más robustas para proteger a una de las comunidades más marginalizadas del país, dijo Amnistía Internacional. Ayer, Amancay Diana Sacayán, una reconocida activista por los derechos de las personas lesbianas, gays, bisexuales, transgénero e intersexo (LGBTI) fue encontrada muerta en su departamento en la capital de Argentina, Buenos Aires. Su cuerpo mostraba signos de violencia. Hace un mes, Marcela Chocobar y Coty Olmos, dos mujeres trans y líderes de organizaciones LGBTI, también fueron violentamente asesinadas en las provincias de Santa Fe y Santa Cruz. “Una nube negra está cubriendo a la comunidad trans en Argentina. A no ser que esta ola de asesinatos sea efectivamente investigada y que aquellas personas responsables sean llevadas a la justicia, se enviará el mensaje que atacar a las mujeres trans está bien,” dijo Mariela Belski, Directora Ejecutiva de Amnistía Internacional Argentina. “Argentina no debe permitir que esta ola de violencia continúe. Establecer una base de datos para documentar crímenes de género y desarrollar mecanismos fuertes para investigar y castigar la violencia de género serían buenos primeros pasos.”
