Amnistía Internacional emprende una ciberacción para pedir que se respeten los derechos de los migrantes que llegan a Ceuta y Melilla

Madrid/Londres.- Las vidas de centenares de migrantes del África subsahariana podrían correr peligro si estas personas intentan cruzar la frontera que separa Marruecos de los territorios españoles de Ceuta y Melilla. Esta conclusión se desprende de la muerte de cinco hombres de origen subsahariano la noche del 28 de septiembre en la frontera entre Ceuta y Marruecos. Por ello Amnistía Internacional emprende hoy una ciberacción a través de la página web: www.actuaconamnistia.org para pedir a los gobiernos de España y Marruecos que protejan y respeten los derechos humanos de estas personas. La organización anima a la ciudadanía a que se sume a esta iniciativa. Uso proporcional de la fuerza Amnistía Internacional pide a ambas autoridades que tomen medidas de inmediato para asegurar que todos los agentes encargados de hacer cumplir la ley, destacados en las fronteras que separan Ceuta y Melilla de Marruecos, se ajustan estrictamente a las normas internacionales que regulan el uso de la fuerza; en particular, que respetan estrictamente los principios de necesidad y de proporcionalidad y que emplean armas de fuego únicamente si hay vidas en peligro y como último recurso para responder a tal peligro. Investigación ya La organización ha acogido con satisfacción el compromiso expresado tanto por las autoridades españolas como las marroquíes de investigar la muerte de los cinco hombres ocurridas la noche del 28 de septiembre. Pero Amnistía Internacional insiste en que esta investigación se realice sin dilación y sea imparcial, exhaustiva e independiente, que se publiquen los resultados, y que se procese a los responsables de las muertes conforme dictan las normas internacionales de justicia procesal. Igualmente, la organización le recuerda a las autoridades de ambos países que deben investigar la muerte de dos ciudadanos de Camerún, ocurridas entre Marruecos y Melilla la noche del 28 al 29 de agosto de 2005. No devolución Amnistía Internacional se opone a las expulsiones ilegales de personas, incluidos menores, que se han venido realizando en Ceuta y Melilla. La expulsión de personas privándoles de acceder a un procedimiento con todas las garantías previstas, viola el artículo 157 del Reglamento de Extranjería. Tales expulsiones además de ser ilegales en España contravienen normas internacionales tales como el derecho a solicitar asilo y el principio de no devolución, piedra angular del sistema de protección internacional vinculante para todos los Estados; y que establece que nadie puede ser enviado a un país donde puede sufrir persecución, corra riesgo de perder la vida, sufrir tortura o trato cruel, inhumano y degradante. Información general Cada año, miles de migrantes, muchos de ellos de países del África subsahariana, tratan de entrar en los territorios españoles. Su número ha ido aumentando en los últimos meses. En la actualidad centenares de migrantes viven en el norte de Marruecos. Unos 700 intentaron hoy cruzar la frontera de Melilla y se cree que centenares más se aprestan a hacer lo mismo tanto ahí como en la frontera entre Marruecos y Ceuta. Mientras tanto, las redadas que han llevado a cabo las fuerzas de seguridad marroquíes en los últimos tres días en los campamentos improvisados, próximos a los territorios españoles, han producido al parecer la detención de 400 migrantes, aparentemente por encontrarse ilegalmente en el país, y la destrucción de sus refugios. El número de migrantes a los que se ha dado muerte o que han sido gravemente lesionados presuntamente a consecuencia de malos tratos o del uso de fuerza excesiva por las fuerzas de seguridad españolas o marroquíes, ha aumentado marcadamente en los últimos meses. El 29 de septiembre, el gobierno español desplegó en Ceuta y Melilla a casi 500 miembros de la Legión para patrullar las fronteras con Marruecos. Las autoridades marroquíes han anunciado que van a enviar 1.600 agentes de seguridad adicionales para patrullar el otro lado de esas fronteras. Amnistía Internacional teme que tanto España como Marruecos puedan estar enviando a la zona a funcionarios del orden que no posean la formación necesaria para enfrentarse a situaciones que requieren control de orden público, y pongan en peligro de esta forma, la vida de más migrantes.