El respeto a los derechos humanos es esencial para la resolución del conflicto en Oaxaca

Londres.- Amnistía Internacional llama a las autoridades federales a que garanticen que los agentes de la Policía Federal Preventiva respeten los derechos humanos de los manifestantes y aseguren el orden público, incluyendo la seguridad de cualquier persona que se encuentre en los alrededores de la manifestación convocada hoy por la Asamblea Popular del Pueblo de Oaxaca (APPO) en la Ciudad de Oaxaca, en respuesta a la operación policial del 29 de octubre. El uso de la fuerza contra los manifestantes y ciudadanos de Oaxaca sólo puede utilizarse como último recurso y con respeto estricto a las normas internacionales de proporcionalidad y necesidad, de acuerdo a la amenaza enfrentada. Según los informes recibidos, al menos dos manifestantes murieron durante la operación policial del 29 de octubre. Entre ellos se encuentra Alberto Jorge López Bernal, quien aparentemente murió como consecuencia del impacto que sufrió por una bomba de gas lacrimógeno en el estómago. Otros manifestantes sufrieron lesiones de diversa consideración. Amnistía Internacional urge a las autoridades federales a que estos incidentes sean investigados de forma independiente con el objetivo de establecer si la policía actuó o no según sus obligaciones legales. Asimismo, las autoridades deben garantizar el pleno respeto a la integridad física y debido proceso de al menos 30 personas que se encuentran detenidas. El 27 de octubre, el periodista Bradley Roland Will murió a consecuencia de impactos de bala sufridos durante enfrentamientos entre individuos vestidos de civil, entre los que se incluían policías municipales, según los informes. Al menos tres personas más habrían muerto en situaciones similares mientras estaban en las barricadas de la APPO en varias partes de la ciudad de Oaxaca. Amnistía Internacional condena estos hechos y urge a las autoridades a llevar a cabo una investigación imparcial para llevar a los responsables ante la justicia. Una investigación independiente debe determinar la responsabilidad de las autoridades municipales y estatales en la promoción o la tolerancia de la violencia y las violaciones de derechos humanos. Amnistía Internacional hace igualmente un llamamiento a los organizadores de las protestas en oposición al Gobernador del Estado de Oaxaca para que respeten el estado de derecho y evitan el uso de cualquier método de protesta que ponga en riesgo la integridad física de otros manifestantes o transeúntes.