Ante la elección del próximo fiscal de la Corte Penal Internacional dentro de unas semanas, Amnistía Internacional pide mayor transparencia en el proceso e insta a los Estados a que se centren exclusivamente en elegir al candidato más calificado. La elección, prevista en diciembre, es una decisión vital que determinará el éxito de la Corte Penal Internacional en la próxima década.
El fiscal tiene la significativa responsabilidad de decidir dónde llevará a cabo la Corte sus investigaciones y qué casos juzgará. Los gobiernos, la sociedad civil y millones de víctimas de todo el mundo tendrán su mirada puesta en el fiscal para lograr el máximo nivel de justicia internacional. Es esencial, por tanto, que se elija al candidato mejor preparado en un proceso público que instaure la confianza de todas las personas que siguen la importante labor de la Corte.
Amnistía Internacional cree firmemente que, en consonancia con los criterios establecidos en el artículo 42.3 del Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional, la persona elegida como fiscal deberá ser o haber sido un fiscal destacado con una extensa experiencia en casos complejos y en la gestión de las funciones de fiscalía, así como contar con un historial demostrado de ejercicio imparcial e independiente de sus obligaciones profesionales. Además, deberá considerarse sumamente conveniente tener experiencia en el enjuiciamiento de crímenes de derecho internacional, sea en el ámbito nacional o en el internacional, así como un profundo conocimiento de determinadas cuestiones, como la violencia contra las mujeres y los menores.
Hoy mismo, el Comité de Búsqueda que lleva trabajando desde febrero de 2011 para identificar a candidatos calificados para el cargo de fiscal presentará a la Mesa de la Asamblea de los Estados Partes una lista de no menos de tres candidatos. Hasta el momento no se han dado a conocer los nombres de las personas cuyas candidaturas está estudiando el Comité.
Ahora que estos candidatos preseleccionados van a ser anunciados a la Mesa, es importante que se anuncien públicamente sus nombres y que se divulguen los historiales profesionales y otros datos relevantes de todos los candidatos en el sitio web de la Corte. Además, el Comité de Búsqueda debe difundir un informe público completo de su labor, incluidos los criterios que ha aplicado para preseleccionar a los candidatos y una declaración en la que se manifieste en qué medida cumple dichos criterios cada candidato.
Una vez que reciba la lista de candidatos, la Mesa pedirá a los Estados que estudien informalmente las candidaturas para tratar de identificar a un candidato de consenso que será nominado y elegido en diciembre.
Aunque Amnistía Internacional reconoce que lo deseable sería identificar a un candidato que goce del apoyo de todos los Estados Partes, a la organización le preocupa que la búsqueda del consenso sobre la elección mediante un proceso informal pueda politizar aún más el proceso en detrimento de la transparencia.
El Estatuto de Roma prevé claramente que la elección del fiscal será competitiva y establece, sin excepción, que “[e]l Fiscal será elegido en votación secreta y por mayoría absoluta de los miembros de la Asamblea de los Estados Partes.”
Los Estados deben centrarse en primer lugar y sobre todo en respaldar al candidato más calificado para el cargo y no cabe esperar que apoyen a un candidato sólo para alcanzar un consenso. Por tanto, si no se puede llegar libremente a un consenso, se deberá pedir a los Estados que nominen formalmente candidatos sin demora para una elección competitiva en diciembre.
A lo largo del proceso que se desarrollará a partir de ahora, Amnistía Internacional pide a los Estados que se abstengan de negociar el intercambio de votos en relación con otras elecciones internacionales (incluida la elección paralela de seis magistrados de la Corte Penal Internacional) o de llegar a otros acuerdos que irían en menoscabo de la integridad del proceso electoral. Estos acuerdos han tenido regularmente un impacto negativo en las elecciones internacionales y deben rechazarse para un cargo de tanta importancia como el de fiscal de la Corte Penal Internacional. Información general El nuevo fiscal de la Corte Penal Internacional será elegido en el décimo periodo de sesiones de la Asamblea de los Estados Partes, que se celebrará en la sede de la ONU en Nueva York del 12 al 21 de diciembre.
En virtud del artículo 42.3 del Estatuto de Roma: “El Fiscal y los fiscales adjuntos serán personas que gocen de alta consideración moral, que posean un alto nivel de competencia y tengan extensa experiencia práctica en el ejercicio de la acción penal o la sustanciación de causas penales. Deberán tener un excelente conocimiento y dominio de al menos uno de los idiomas de trabajo de la Corte.” La persona que sea elegida fiscal tendrá un mandato de nueve años que comenzará en julio de 2012. //FIN
