Después de que la última protesta celebrada en Hong Kong el domingo desembocara en actos violentos, entre ellos el ataque de un grupo de hombres contra varias personas en la estación de tren de Yuen Long, Man-kei Tam, director de Amnistía Internacional Hong Kong, declaró:
“La policía no debe dejar a la gente a merced de matones violentos. Aunque es preciso llevar ante la justicia a los responsables de los ataques, la respuesta policial del domingo por la noche es una deficiencia grave que debe investigarse. La policía debe proteger a la gente sin importar cuál sea su postura política. La policía debe extraer rápidamente lecciones de lo acontecido ayer por la noche para evitar que se repita.”
“Hong Kong está pagando un precio muy alto por la falta de liderazgo político. Carrie Lam continúa avivando la situación al negarse a retirar completamente el proyecto de ley de extradición y a abrir una investigación independiente de las reiteradas deficiencias de la policía.”