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1.320.000 firmas para acabar con la pena de muerte

Madrid.- Amnistía Internacional ha entregado a la embajada nigeriana más de 1.320.000 firmas recogidas a través de la página web www.amnistiapornigeria.org para pedir al Gobierno de Nigeria que acabe con la pena de muerte en el país. Ahora la organización de derechos humanos a través de estas firmas pide al ejecutivo nigeriano que adopte una moratoria para todas las ejecuciones sentenciadas hasta el momento. Una medida que para Amnistía Internacional podría suponer un gran avance, así como un paso previo para el fin de la pena de muerte en el país africano. Pena de muerte en Nigeria En Nigeria se sigue condenando a personas a pena de muerte mediante lapidación por delitos relacionados con la sexualidad. Durante el 2003 y el 2004 no se llevaron a cabo ejecuciones en Nigeria, sin embargo tanto los tribunales superiores como los tribunales de la ley islámica del norte del país siguieron dictando condenas a muerte. Las normas penales basadas en la ley islámica prevén la pena de muerte por delito de fornicación.  La pena de muerte sigue siendo contemplada por la ley en Nigeria y la constitución de la República Federal de Nigeria de 1999 no prohíbe su aplicación. Desde julio del 2003, más de 480 personas están condenadas a muerte, 11 de ellas mujeres. Amnistía Internacional considera que la pena muerte constituye una violación extrema de los derechos humanos. En el caso de Nigeria, la aplicación de la pena de muerte relacionados con la sexualidad es especialmente discriminatoria con las mujeres que tienen una situación social y económica desfavorecida. En octubre del  2004, el Grupo de Estudio Nacional sobre la Pena de Muerte, que había sido establecido por el propio Presidente de Nigeria,  publicó su informe en el que como conclusión recomendaba la imposición de una moratoria de las todas las ejecuciones hasta que el sistema de justicia nigeriano pudiese garantizar juicios justo. El Gobierno nigeriano todavía no ha adoptado dicha moratoria. Información general En relación con las informaciones vinculadas a la ratificación de la condena a muerte por lapidación a Amina Lawal y a Safiya Husaini que continúan circulando por internet, Amnistía Internacional quiere aclarar que no es la fuente de dichas informaciones, ya que ambas mujeres fueron absueltas gracias a la presión internacional que se realizó sobre estos casos. Amina Lawal, mujer de 31 años nigeriana, fue condenada a morir lapidada por un tribunal de la Sharia en marzo de 2002 acusada de tener un hijo fuera del matrimonio. Bajo la legislación de la Sharia, en vigor en 12 estados del norte de Nigeria desde 1999, este hecho es suficiente para ser declarado culpable de un crimen de adulterio y puede tener como castigo la pena de muerte por lapidación. El 25 de septiembre de 2003 Amina Lawal fue absuelta, ya que el tribunal consideró que no tuvo oportunidad de defenderse. Safiya Husaini, de 35 años y madre de cinco hijos fue absuelta por un tribunal islámico nigeriano de apelación de una condena impuesta en octubre de 2001 por un supuesto delito de adulterio. El 26 de marzo de 2002 la corte anuló la condena por los errores procesales registrados en el juicio.

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