Petición antes del cierre
La situación de personas refugiadas y migrantes en Ceuta y Melilla.
Actualización a 17 de enero:Según las últimas informaciones recibidas por Amnistía Internacional, Marian iba a ser inmediatamente trasladada a la península. Sin embargo, dicho traslado se ha suspendido hasta que la Policía practique unas pruebas de ADN a su hija menor de tres años. A estas alturas, se está cuestionando la filiación entre madre e hija, cuando llevan viviendo juntas en el CETI más de un año, sin que nadie del personal haya dudado de la misma. Estas medidas estarían vulnerando los derechos, tanto de la madre, como de la menor de acceder a protección, así como a una atención especializada.
Marian, de 27 años y nacionalidad argelina, vive desde hace más de un año con su hija de tres años en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) de Melilla. Durante mucho tiempo, fue maltratada por su marido, que incluso llegó a obligarla a prostituirse. Una vez en España, las palizas y los insultos continuaron, incluso dentro del CETI. Tras estas agresiones, la única medida que se tomó para proteger a Marian fue denegar la entrada en el CETI a su marido. Este hecho no mejoró su situación, ya que continuó sufriendo amenazas, incluso de muerte, hasta el punto de que durante mucho tiempo no se atrevió a salir a la calle.