Las protestas masivas de las últimas semanas en Myanmar están siendo aplastadas mediante una combinación de fuerte presencia militar en las calles, graves violaciones de derechos humanos y detenciones masivas.
Esta acción está cerrada. ¡Gracias a las más de 47.000 personas que participaron en ella!
Los informes sobre las numerosas detenciones arbitrarias, tomas de rehenes, palizas y torturas bajo custodia y desapariciones forzadas en Myanmar ponen claramente en entredicho cualquier afirmación de las autoridades myanmaras sobre la vuelta a la normalidad. Por ello Amnistía Internacional sigue trabajando sobre la situación en el país, documentando los abusos y haciendo públicos los testimonios de las víctimas.
La buena noticia es que Thet Naung Soe, un estudiante considerado preso de conciencia por AI condenado a 14 años de prisión tras una protesta contra el gobierno, ha sido puesto en libertad tras haber cumplido cuatro años de prisión. A través de la red de acciones urgentes, AI sigue trabajando por la situación de otros activistas de Myanmar detenidos o condenados.
Petición original:
Las protestas masivas de las últimas semanas en Myanmar están siendo aplastadas mediante una combinación de fuerte presencia militar en las calles, graves violaciones de derechos humanos y detenciones masivas. En todas las esquinas de las calles de Yangon –principal centro de las protestas– son visibles un elevado número de soldados, y el miedo es generalizado.
Según informes, ya han muerto al menos diez personas durante la represión, aunque se teme que las cifras pueden ser muy superiores. Asimismo se ha golpeado a monjes budistas y se ha detenido a miles de manifestantes pacíficos. Estas nuevas violaciones se suman a la supresión de los derechos humanos endémica en el país.
Es necesario que condenemos enérgicamente las graves violaciones que se están cometiendo y que exijamos el cese inmediato de la represión violenta de las manifestaciones pacíficas.