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EGIPTO: PAREMOS LA VIOLENCIA

Protesta en El Cairo
Protesta organizada por la Guardia Republicana el viernes 5 de julio en el Cairo © Amnistía Internacional
¡Gracias!

Esta acción ha finalizado. Hemos sido 41.327 firmantes

Petición antes del cierre

Abusos a los derechos humanos e impunidad de las fuerzas de seguridad siguen siendo la tónica dominante en Egipto. ¡Actúa!

Esta acción ha finalizado (3 de octubre de 2013)

Tras el derrocamiento del presidente Mohamed Morsi y la brutal represión de las protestas durante los meses de julio y agosto, las autoridades egipcias han prometido llevar a cabo investigaciones sobre la violencia y para ello se han creado varios comités. Sin embargo, sus mandatos son poco claros y las investigaciones que están en curso están marcadas por la falta de transparencia, y parecen estar más orientadas a un ajuste de cuentas político que a la búsqueda de verdad y justicia. Por ello, seguimos pidiendo a las autoridades egipcias que ordenen unas investigaciones independientes e imparciales, y aseguren el acceso al país de expertos de la ONU para investigar el uso sistemático e injustificado de fuerza excesiva y medios letales por parte de las fuerzas de seguridad. Además, sigue siendo necesario que se aseguren los derechos básicos de las personas detenidas, como el acceso a sus familiares y a un abogado, poniendo en libertad a quienes no son acusados de un delito común reconocible, y se aborde la cuestión del acoso sexual que a diario sufren las mujeres en Egipto.

Las firmas han sido enviadas al Embajador de Egipto en España. Gracias a las más de 41.000 personas que han participado en esta acción.  

Petición antes del cierre:

La escalada de violencia sin precedentes en Egipto sigue sumando víctimas mortales, que se contabilizan en centenares desde que empezaron las protestas en favor del depuesto presidente Mohamed Morsi.

La investigación llevada a cabo en el terreno por Amnistía Internacional apunta a que las fuerzas de seguridad han actuado sin tener en absoluto en cuenta la vida humana y su respuesta a la violencia por parte de algunos manifestantes ha sido manifiestamente desproporcionada, usando medios letales injustificadamente y no diferenciando entre manifestantes violentos y no violentos. El Ejército también rompió su promesa de permitir salir en condiciones de seguridad a personas heridas, atacando incluso hospitales como el de Rabaa al Adawiya en El Cairo.

Amnistía Internacional también ha documentado abusos por parte de partidarios del presidente Morsi, que incluyen palizas, tortura y asesinato. Se han producido ataques contra edificios del gobierno, estaciones de policía y policías y algunos manifestantes también han disparado munición real contra residentes locales, incluidos niños y niñas, y presuntos opositores.

Amnistía Internacional ha constatado un alarmante aumento de la violencia sectaria contra cristianos coptos, ejercida aparentemente como represalia por su presunto apoyo a la decisión de derrocar a Mohamed Morsi.

Dado el deficiente historial de las autoridades egipcias en lo que se refiere a hacer rendir cuentas a los miembros de las fuerzas de seguridad, Amnistía Internacional pide que se permita el acceso al país de expertos de la ONU, en especial del relator especial sobre ejecuciones extrajudiciales, sumarias o arbitrarias, para que investiguen las circunstancias de la violencia y el uso sistemático e injustificado de fuerza excesiva y medios letales por parte de las autoridades egipcias desde la “Revolución del 25 de enero”.

Tu firma sigue siendo mas necesaria que nunca. ¡Actúa!

Fui al mercado a las 4 de la tarde... cuando volví mi hijo no estaba, había ido a ver las manifestaciones... me dijeron que había muerto; le rompieron los brazos y las piernas, y le arrojaron desde el tejado” Madre de Mohamed Badr al Din, de 19 años, residente de Alejandría

Un tipo grande con barba me persiguió con un cuchillo enorme y una bandera negra... Empezó a pegarme y levantó el cuchillo diciendo: 'Dios es grande'”. Hombre agredido en una manifestación en Alejandría.

La ambulancia llegó muy tarde porque no podía conducir en medio de los tiroteos; estaba cubierta de sangre cuando llegó... los del Ministerio de Interior me trataron con desprecio y me dijeron: '¿No quieren ser mártires? Déjales que se desangren'” Mujer herida en enfrentamientos en El Cairo.

Desde que empezaron las protestas en favor del depuesto presidente Mohamed Morsi, cientos de personas han perdido la vida en Egipto, y miles han resultado heridas. Al menos 51 partidarios de Morsi murieron el lunes 8 de julio durante los enfrentamientos producidos frente a la sede de la Guardia Republicana.

Muchas de las personas fallecidas y de los heridos recibieron disparos de perdigones y de munición real en la cabeza y la parte superior del cuerpo, entre ellos mujeres y niños.

Además, cientos de personas partidarias de Morsi han sido arrestadas y sometidas a malos tratos -incluidas descargas eléctricas- durante su detención, además de denegarles el acceso a su familia y a un abogado. De muchas de ellas se desconoce el paradero, lo que puede constituir desaparición forzada.

En este contexto, de nuevo, las mujeres que han salido a la calle para participar en las protestas han sido víctimas de brutales ataques de violencia sexual a manos de turbas de hombres y ante la inacción de las autoridades. Organizaciones que trabajan en el terreno tratando de prevenir los ataques contra las mujeres manifestantes han documentado más de 40 ataques solamente en las manifestaciones del 30 de junio en El Cairo, pero la verdadera cifra es probablemente mucho mayor. 

Las autoridades egipcias deben poner fin de forma inmediata a todos estos abusos a los derechos humanos y a la impunidad que los rodea.