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Actuamos por los derechos humanos
en todo el mundo

Tragedia en la valla de Melilla ¡Nunca más!

Un migrante es detenido por dos policias
Un migrante es detenido por policías en suelo español después de cruzar las vallas que separan Melilla de Marruecos el viernes 24 de junio de 2022. © AP Photo/Javier Bernardo
¡Gracias!

Esta acción ha finalizado. Hemos sido 5.585 firmantes

Desgraciadamente, a pesar de tantas firmas recopiladas y una campaña en la que hemos presionado durante años para revertir las vulneraciones de derechos de la Ley Mordaza, que incluye la disposición adicional que pretende legalizar la práctica de las devoluciones en caliente, ésta no ha sido reformada.

Desde Amnistía Internacional hemos publicado varios informes denunciando las implicaciones de esta ley, así como una gran cantidad de comunicados, campañas en redes, cartas y reuniones con autoridades, hemos hecho multitud de acciones creativas y salido a la calle y movilizado a miles de personas junto con una cantidad enorme de organizaciones.

Las firmas han sido un motor que han impulsado muchas de las acciones que hemos realizado, y por ello, muchas gracias por cada una de ellas. Seguiremos trabajando para que se respeten los derechos de las personas migrantes y refugiadas que se ven afectados por esta ley.

Petición antes del cierre

Lo vivido el 24 de junio de 2022 en el paso fronterizo entre Marruecos y Melilla, que según algunas organizaciones ha implicado al menos 37 muertes, supone la mayor tragedia en la Frontera Sur en los últimos 30 años. No puede repetirse nunca más.

Las imágenes y las filmaciones son impactantes. Policías españoles entregan a posibles refugiados a policías marroquíes, llevando a cabo devoluciones en caliente sin ningún tipo de averiguación o trámite sobre si necesitan protección. Una vez entregados, estos policías los golpean.

Hemos visualizado las imágenes aterradoras de cuerpos humanos –muertos y vivos– hacinados en el suelo mientras se pasean entre ellos policías marroquíes que, para cerciorarse si respiran o se mueven, los sacuden con la punta de porras y bastones.

Tenemos indicios sólidos de ocho violaciones de derechos humanos: violación del derecho a la vida; del derecho a la integridad física y malos tratos a personas bajo custodia; trato cruel, inhumano y degradante; uso excesivo de la fuerza; violación del principio de no devolución; del derecho a solicitar asilo; del derecho a una investigación eficaz y oportuna; y del derecho a la libertad personal.

La respuesta  del Gobierno español ante esta grave crisis de derechos humanos ha sido inadecuada: ha elogiado la actuación policial de las fuerzas del orden españolas y marroquíes, ignorando el uso excesivo de la fuerza en dichas actuaciones y otras posibles vulneraciones de derechos humanos.

Exigimos a las autoridades españolas que no lleven a cabo devoluciones en caliente. Deben proteger a quienes huyen de la guerra y la persecución, facilitando que puedan solicitar protección internacional de forma segura, y a abandonar la política de dobles raseros en materia de asilo y refugio.

Ahora que se está negociando la reforma de la Ley Orgánica de Protección de la Seguridad Ciudadana, debe derogarse la disposición adicional que busca dar cobertura legal a las expulsiones sumarias de España a Marruecos y se deben incorporar mecanismos independientes de investigación para evitar el uso excesivo de la fuerza o actuaciones arbitrarias de la policía.