Los pocos avances para las mujeres que ha habido tras la intervención internacional en 2001 están en peligro en las mesas de negociación con los talibanes. ¡Actúa!
Esta acción ha finalizado. Gracias a las más de 15.000 personas que han pedido al presidente afgano que no negocie con los derechos humanos en particular los de las mujeres en Afganistán ni durante los procesos de transferencia de las fuerzas de seguridad ni en las negociaciones de reconciliación con los talibanes.
Como
buena noticia podemos señalar que el Consejo Europeo de Asuntos Exteriores sobre Afganistán ha incluido las preocupaciones sobre los derechos humanos de los afganos, en particular de las mujeres, en su petición al gobierno afgano para que muestre resultados tangibles. Representantes de Amnistía Internacional, junto con miembros de la sociedad civil afgana, estarán presentes en el encuentro ministerial de alto nivel que se celebra en Bonn el 5 de diciembre 2011, donde se abordará el proceso de paz con los talibanes, para vigilar el desarrollo de la reunión e intentar que los derechos humanos, en particular los de las mujeres, no queden en el olvido.
Petición original:
“Las mujeres afganas tenemos mucho que ganar con la paz y mucho que perder con cualquier forma de reconciliación [proceso de paz] que comprometa los derechos de las mujeres. No puede haber seguridad nacional sin seguridad para las mujeres. No puede haber paz si la vida de las mujeres está llena de violencia, si nuestras hijas no pueden ir a la escuela, si no podemos pisar la calle por miedo a que nos arrojen ácido.”
Mary Akrami, directora del Centro de Desarrollo de Capacidades de las Mujeres Afganas
Una de las razones aducidas a menudo para justificar la acción militar en Afganistán en 2001, fue que había que defender los
derechos humanos, en particular los de las
mujeres. Diez años después del derrocamiento de los talibanes, ha habido algunos avances: el acceso de las niñas a la educación ha aumentado, al igual que la representación de las mujeres en el Parlamento.
Con la nueva Constitución, las mujeres y los hombres tienen la misma condición jurídica.No obstante,
estos avances que tanto ha costado hacer podrían verse gravemente comprometidos si el gobierno afgano y sus socios internacionales acceden a entablar un proceso de reconciliación y negociaciones de paz con los líderes de los talibanes y otros grupos insurgentes sin velar por que se establezcan mecanismos para
garantizar los derechos humanos.
Muchas mujeres afganas temen que en la consecución de un acuerdo con los líderes talibanes se sacrifiquen sus derechos. En las zonas actualmente bajo su control,
los talibanes continúan restringiendo gravemente los derechos humanos de las mujeres. Han lanzado un ataque concertado contra la educación de las niñas y asesinado a mujeres que habían destacado en la vida pública. Las defensoras de los derechos humanos de las mujeres afganas temen que sus recientes logros se vean gravemente menoscabados si los talibanes vuelven al gobierno.