Con el aumento de la falta de seguridad en Afganistán, las defensoras de los derechos de las mujeres están más amenazadas que nunca.
Esta acción ha finalizado (16 de enero de 2016)
Damos las gracias a las más de 14.000 personas que se han sumado a Amnistía Internacional para pedir al gobierno afgano que tome medidas para proteger a defensoras de los derechos de las mujeres y niñas. Amnistía Internacional seguirá trabajando por la situación de las defensoras de derechos humanos en Afganistán.
Petición antes del cierre
“
El 4 de agosto de 2013, dos días antes de la fiesta musulmana del cordero (Eid), los talibanes atacaron mi vehículo cuando llevaba a casa a mi familia. Mataron a mi hija Dunya, de nueve años, y a mi hermano Ghulam Jailani. La hermana gemela de Dunya quedó paralizada a causa de las heridas que sufrió. Yo recibí nueve disparos, algunos en el hígado, un pulmón y una pierna.” Roghul Khairzad, senadora y defensora de los derechos de las mujeres en Afganistán. Sólo en el último año, Amnistía Internacional ha registrado un número alarmante de
amenazas y ataques contra quienes defienden los derechos de mujeres y niñas. Con la toma por parte de los talibanes de la provincia de
Kunduz y alrededores a finales del pasado mes de septiembre esta amenaza se ha exacerbado aún más. Los talibanes han llevado a cabo registros de casa en casa en busca de defensoras que supuestamente tenían en “la lista”. Muchas lograron huir de la ciudad y las que se quedaron, temiendo por sus vidas, se escondieron. Las defensoras
no sólo se ven amenazadas por los talibanes, sino también por parte de miembros del gobierno, autoridades, e incluso familiares que ven su trabajo como un desafío a las normas culturales, religiosas y sociales que dictan el papel de la mujer. Estos ataques y amenazas se unen a la indiferencia por parte de las autoridades ante su difícil situación. Esto se traduce en falta de protección para las defensoras y en la que quienes las atacan y persiguen se libran del castigo perpetuándose la impunidad.
¡Firma! Pide que el gobierno afgano tome medidas para proteger a defensoras de los derechos de las mujeres.