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Actuamos por los derechos humanos
en todo el mundo

Justicia para Venezuela

Manifestantes con banderas de Venezuela
¡Gracias!

Esta acción ha finalizado. Hemos sido 6.259 firmantes

Amnistía Internacional considera que la mejor forma de lograrlo es que se cree una Comisión de Investigación en el seno de la ONU que de forma independiente e imparcial documente las ejecuciones extrajudiciales, detenciones arbitrarias, uso excesivo de la fuerza, negación del derecho a alimentación y medicamentos, etc.

Seguimos trabajando para proteger los derechos de la población venezolana.

Petición antes del cierre

Las fuerzas bajo la línea de mando de Nicolás Maduro son responsables de ejecuciones extrajudiciales, de uso de fuerza excesiva contra manifestantes y de la detención arbitraria de centenares de personas.

Si estuviésemos en un país libre a mi hermano no lo hubieran matado... su único 'delito' fue ser opositor.

Este es el caso de miles de venezolanos víctimas de las Fuerzas de Seguridad bajo el mando de Nicolás Maduro, que se han ensañado con quienes salieron a las calles en enero a exigir alimentos, medicinas y un cambio de gobierno.

En lugar de buscar soluciones al sufrimiento de la gente, las autoridades respondieron enviando militares y policías a las calles para reprimir y castigar a quienes piensan diferente. En sólo cinco días, al menos 49 personas fallecieron durante las protestas, todas por arma de fuego. Más de 900 fueron detenidas de forma arbitraria, entre ellas 137 adolescentes.

Alixon Pizani, panadero de 19 años, falleció el 22 de enero por una bala en el tórax, cuando protestaba con un grupo de amigos en Caracas. Según testigos, un oficial con uniforme de la Policía Nacional Bolivariana montado en una moto disparó con un arma corta de forma aleatoria contra la multitud, hiriendo a dos personas gravemente.

Sin que ninguna autoridad le brindara auxilio, Alixon fue trasladado a un centro de salud, donde murió.

Las autoridades bajo el mando de Nicolás Maduro ejecutaron extrajudicialmente y de forma selectiva a personas que habían participado en las protestas, y que luego fueron presentadas como “delincuentes” muertos en enfrentamientos con las autoridades.

En Venezuela no hay esperanza de verdad ni justicia para las víctimas. Es hora de que la ONU actúe y los apoye. Pide a los Estados miembro del Consejo de Derechos Humanos de la ONU que cree un mecanismo de investigación independiente sobre la situación de derechos humanos en Venezuela.