Hace unas semanas Pedro Sánchez fue elegido Presidente del Gobierno. Tiene por delante un gran reto, no exento de dificultades. La población española está preocupada por temas económicos, la corrupción, el paro… Son problemas muy serios que necesitan de toda su atención, pero entre estos problemas, entre estos retos, hay uno que no puede quedar fuera de la agenda: los derechos humanos.
Actualmente en España hay activistas sancionados con multas desproporcionadas por ejercer su
derecho a expresarse en libertad, personas que no pueden pagar sus
medicinas, personas que pierden sus
casas en procesos en los que se encuentran indefensas y
mujeres cuyos derechos son pisoteados cada día, entre otros.
La lista es interminable, pero esta lista es nuestro gran reto, y debe serlo también para el nuevo Presidente. Queremos un país en el que poder expresarnos libremente, en el que las mujeres víctimas de violencia de género encuentren
protección, en el que las personas refugiadas puedan
reconstruir sus vidas, en el que las heridas se cierren con
verdad, con justicia y con reparación. En el que todas las personas tengan acceso a una
atención sanitaria de calidad y vean garantizado su
derecho a la vivienda.
Y no solo nos importa lo que sucede en España. El apellido de nuestra organización es “internacional”, y queremos que
España sea un ejemplo no solo de puertas para adentro, también de puertas para afuera.
Conflictos armados como Yemen, la violencia de estado contra quienes se manifiestan pacíficamente, la
pena de muerte, las restricciones a la
libertad de expresión, la
discriminación que sufren las
mujeres en todo el mundo y otras violaciones de derechos humanos han hecho que cientos de miles de personas hayan alzado sus voces en todo el mundo, y
España no puede quedarse al margen.
Queremos que España deje de vender
armas a países como Arabia Saudí o Israel. Queremos que España apueste de verdad por incluir los derechos humanos en sus relaciones con otros países. Queremos que España no se olvide que
defensores y defensoras de derechos humanos son perseguidos en todo el mundo. Queremos que España combata activamente los
discursos antimigrantes y antirefugiados. Que defienda los derechos de las
mujeres y las niñas en el mundo.
Queremos una España abierta y solidaria.
Es hora de construir, de mirar hacia adelante. Este es el gran reto del nuevo Gobierno.
Si estás de acuerdo con estos diez puntos, firma y enviaremos esta petición en tu nombre al Gobierno de España.